domingo, octubre 07, 2012

Autorretrato

Mira esos ojos.
Tienen vida, sueños
y melancolía.
En esa miel han pasado muchas cosas.
Muchas personas, quizás unos mundos.
Algunas se han ido;
quizás ya no regresen.

Un cuerpo consumido
en sus propios vicios.
Mente despierta y soñadora
en un cuerpo que no resiste sus propios embates.
Diseñado frágil,
pero tenaz, obstinado y un poco torpe.
Quizá hoy se puede levantar.
Es un juego que se llama
"A ver quién resiste más".

Procesador de cuádruple núcleo,
turbocargador,
mal diseñada está la tarjeta madre
que no puede enfriarse rápido.
Concebido en hornos estelares,
fascinación propia (y ajena, tal vez).
A veces las lágrimas son la única forma de disipar tanto calor
del cuarto de máquinas.

Cigarros,
cigarritos. Pasiones que consumen, besos por dar,
un salto que dar; puede ser que soñar pueble
uno que otro corazón.
Llene un alma
que sienta que no se llena con nada.
Un brasero apagado,
ciencias atómicas que explican la chispa.

Es tiempo de vagar.
Encender.
Siempre traigo conmigo un encendedor
para encender. Hay fuegos, se sabe,
que deben ser perpetuos.

Llenar me llena.
He de seguir llenando.
He de vivir.
Vive, hombre.
Vive.

No hay comentarios:

Publicar un comentario